Me parece una buena noticia —y una llamada de atención— que la Reserva Federal celebre el 21 de octubre una conferencia explícita sobre innovación en pagos centrada en stablecoins, tokenización e inteligencia artificial. Creo que ya no estamos ante un debate teórico: la Fed habla de “innovar y mejorar el sistema de pagos” y convoca a reguladores, académicos e industria justamente para eso. Desde mi perspectiva, es el momento de que el talento y la industria tecnológica de España y Europa tomen nota y se posicionen con ambición y rigor.
La señal de la Reserva Federal
El anuncio de la Junta de la Reserva Federal introduce a estos activos y tecnologías como elementos centrales del ecosistema de pagos. Como dijo el Gobernador Christopher J. Waller, “La innovación ha sido una constante en los pagos para satisfacer las necesidades cambiantes de consumidores y empresas”. La conferencia va a incluir paneles sobre la convergencia entre finanzas tradicionales y descentralizadas, nuevos casos de uso de stablecoins, la intersección de la inteligencia artificial y los pagos, y la tokenización de productos y servicios financieros. Además, la Fed retransmitirá el evento en su web, lo que facilita el acceso a quienes no puedan desplazarse.
Que la Fed coloque estos temas en una mesa de diálogo oficial no es un gesto menor: señaliza que stablecoins, tokenización e IA ya no son experimentos marginales, sino componentes que se estudian como parte del “stack” de pagos. Jakob Kronbichler, cofundador y CEO de Clearpool, lo resumió claramente: esos instrumentos “ya no son experimentos marginales sino partes centrales del stack de pagos”. Esa frase define el cambio de estatus que está ocurriendo.
Qué significa para la industria y para nosotros aquí
Para empresas de videojuegos, estudios, plataformas de streaming y creadores de contenido, la convergencia de pagos tradicionales y descentralizados abre posibilidades prácticas: microtransacciones más eficientes, mercados de objetos tokenizados, sistemas de recompensa y financiación peer-to-peer mejor integrados. Para las startups fintech, la tokenización y las stablecoins prometen formas nuevas de gestionar liquidez y crédito on-chain. Pero todo esto exige claridad regulatoria y estándares interoperables.
En ese sentido, no se puede pasar por alto lo que ya está ocurriendo en paralelo: la CFTC ha lanzado su propio Crypto Sprint, y actualmente está en fase de consulta pública hasta el 20 de octubre para evaluar custodia, comercio minorista apalancado y protecciones al consumidor. A la vez, la declaración conjunta de la SEC y la CFTC buscó aclarar cómo los exchanges registrados pueden listar ciertos productos cripto al contado, incluyendo operaciones minoristas apalancadas, dentro de iniciativas como Project Crypto y Crypto Sprint. Son señales de que los reguladores norteamericanos están intentando armonizar criterios y dar más certeza al mercado.
Europa y España tienen industria y talento suficientes para participar con fuerza en esos cambios: desarrolladores, equipos de seguridad, empresas de pagos, estudios creativos y universidades pueden colaborar para ofrecer soluciones robustas y competitivas. No hace falta copiar exactamente lo que se haga en EE. UU.; hace falta adaptar, aportar estándares europeos y demostrar capacidad técnica y de gobernanza. Como apuntó Kronbichler, “La prioridad ahora es la claridad: reglas que reconozcan las stablecoins como activos de liquidación y creen estándares consistentes para los mercados de crédito y liquidez tokenizados”. Esa claridad es la que debemos exigir y construir.
Qué vigilar: tendencias, riesgos, próximos pasos
Tendencias. Voy a estar atento a tres líneas: 1) cómo se integran la IA y los pagos en prácticas como detección de fraude, evaluación crediticia y gestión de riesgos —Kronbichler dijo que la IA se está “moviéndose hacia el núcleo de los pagos”—; 2) el avance en la aceptación de stablecoins como activos de liquidación y la tokenización de activos financieros; y 3) la coordinación regulatoria entre agencias (SEC, CFTC) y, a nivel global, los diálogos y pilotos que están impulsando la Autoridad Monetaria de Singapur y el Banco de Pagos Internacionales.
Riesgos. No nos engañemos: hay riesgos operativos, de gobernanza y de fragmentación. Si no hay reglas claras y estándares comunes, las soluciones tokenizadas pueden crecer de forma desordenada y con fricciones de liquidez. También está el riesgo reputacional y de adopción si los modelos de IA no son explicables y verificables: como advirtió Kronbichler, hacen falta modelos con gobernanza clara y supervisión humana incorporada.
Próximos pasos. A corto plazo conviene seguir la conferencia del 21 de octubre (se retransmitirá), la fase de consulta pública de la CFTC hasta el 20 de octubre y las interpretaciones de la SEC y la CFTC sobre listado de productos cripto. A medio plazo, Europa debe avanzar en marcos que permitan a la industria escalar sin fragmentación y fomentar la interoperabilidad en pagos tokenizados. Desde aquí, mi apuesta es simple: combinar la creatividad de nuestros equipos —streamers, desarrolladores, fintechs y estudios— con un enfoque riguroso en seguridad, gobernanza y cumplimiento. Así podremos convertir la oportunidad que ahora discuten en Washington en una ventaja competitiva real para la industria española y europea.